El voluntariado ambiental cierra esta edición con el aumento de parejas reproductoras del chorlitejo patinegro

Valencia

Campillo ha destacado “lo importante que este voluntariado para formar a sus participantes en ciudadanía y sensibilización medioambiental” y ha firmado que tomará nota de todas las indicaciones que han hecho los voluntarios para mejorar la protección de estos parajes, como la mejora de la información o la ampliación de las zonas cerradas reservadas a estas especies”.

El proyecto, en el que participa el Ayuntamiento de València a través del servicio Devesa-Albufera tiene como objetivo proteger los nidos durante el la temporada crítica de nidificación del chorlitejo patinegro en las playas de la ciudad e València. El vicealcalde también ha agradecido la labor que están realizando las entidades SEO/BirdLife i Acció Ecologista Agró, “porque gracias a ellas hemos podido realizar este voluntariado durante los últimos meses, tan necesaria para ayudar a la reproducción de estas aves. Especies como el chorlitejo patinegro que está amenazada y necesita de esta ayuda para subsistir”.

En el Estany de Pujol, dada la fuerte presión de visitantes durante el cierre perimetral establecido por las restricciones derivadas de la pandemia, el Servicio Devesa Albufera solicitó el adelanto a febrero de la ejecución del voluntariado ambiental previsto para junio. A lo largo del periodo se han realizado tres convocatorias, en las que han participado 49 voluntarios, que han participado en turnos de dos horas con distintos horarios en función de la temporada y la afluencia de visitantes

Las principales incidencias se han producido con las personas que paseaban a sus perros sueltos, los ciclistas, los fotógrafos que saltan la talanquera y los gatos asilvestrados que crían en las inmediaciones del Estany. Gracias los voluntarios han podido nidificar 34 parejas de charrancito común (Sternula albifrons) y 9 parejas de Chorlitejo (, además de una pareja de cigüeñuela común (Himantopus himantopus). El número de parejas de chorlitejo ha ido variando a lo largo de la temporada de cría, ya que inicialmente comenzaron 3 parejas, pero finalmente se han contabilizado hasta 9 parejas, provenientes de otros enclaves del parque natural donde no han podido reproducirse con éxito.

En la Playa de Rafalell y Vistabella han participado 16 voluntarios, que desde el 13 de junio han recorrido las playas informando y concienciando a los visitantes, especialmente a las personas que pasean a sus perros, acerca de la necesidad de llevar el perro atado y respetar al resto de especies que viven en el entorno. Han detectado y protegido varios nidos que se encontraban fuera de las talanqueras, han repartido bolsas de tela para sensibilizar a las personas sobre el impacto de las bolsas de plástico de un solo uso en el medio ambiente, y han retirado residuos de la playa. Una vez terminada la temporada de reproducción 3 pollitos de chorlitejo han conseguido salir adelante, algo a destacar ya que en el año 2013 en el marjal de Rafalell y Vistabella sólo había una pareja de esta especie en peligro de extinción, y en la actualidad se cuenta con cerca de diez.

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